domingo, 27 de noviembre de 2016

La mujer en el mundo grecolatino.

Hola de nuevo, venimos a hablaros sobre la mujer en el mundo grecolatino.

La mujer desde el día de su nacimiento hasta su muerte, vive bajo el control de los hombres. Ellas no podía votar ni tener empleo público, heredar o ser poseedoras de propiedades, ni si quiera comprar algo que costara algo más del precio determinado. Pero por otro lado tenía "poder" dentro de la casa ya que se encargaba de dirigirla y controlar el dinero de la familia.
Había dos tipos diferentes de mujeres según el sitio donde viviesen:
  •  Mujer en Esparta:
                    - Los espartanos eran conocidos por su fuerte ejército, el mismo que entrenaban a sus mujeres para que fueran fuertes y saludables al igual que los hijos varones que tenían que tener para aumentar el número de soldados.
                    - Las jóvenes espartanas crecían al aire libre aprendiendo a correr, luchar, lanzar el disco, la jabalina, etc. al igual que los varones.
                    - Llevaban faldas cortas para mejorar la libertad de movimiento para hacer ejercicio. Estos vestidos debieron resultar escandalosos en Atenas.
  • Mujer en Roma:
                   - La mujer romana estaba sometida por su padre o su marido, es decir, cualquier atisbo de libertad era nulo.
                   - Las niñas tampoco recibían la misma educación que los niños, raramente iban a la escuela media y nunca a la superior, aunque algunas alcanzaban un alto nivel cultural.
                   - A pesar de esto la mujer disfrutaba de una consideración y libertad mayor que en otras sociedades.
                   - Una mujer que influenció en la política romana fue Cornelia por su modelo de matrona a la hora de realizar todo lo estipulado para la mujer de forma ejemplar.
En esa época aparecieron unos juegos llamados "Juegos Heraicos", que eran competencias deportivas femeninas que se realizaban cada cuatro años, en honor a la diosa Hera, eran los únicos juegos en los que podían participar las mujeres.
Cristina Álvarez y Alicia Sierra.


No hay comentarios:

Publicar un comentario